Ficha técnica
Título original: La voz de Amunet
Autor/a: Victoria Álvarez
Ilustraciones: Cecilia García
Ilustraciones: Cecilia García
Año: 2019
Género: juvenil, fantasía, histórica
Editorial: Nocturna Ediciones
Nº de páginas: 712
Nº de páginas: 712
Precio: 18 €
Sinopsis
Egipto, 1346 a.C.: Desde que tiene uso de razón, la pequeña Amunet ha sido capaz de comunicarse con los animales, pero su vida da un vuelco cuando los sacerdotes de Amón, el clero más poderoso del Antiguo Egipto, descubren su prodigioso don. Convencidos de que es la pieza que necesitaban en su rompecabezas político, se la llevan al templo de Ipet Sut, donde comenzará su formación como heka o hechicera al servicio de la familia real.
Egipto, 1799: Cuando el ejército de Napoleón Bonaparte se hace con el control de El Cairo, la banda de ladrones a la que pertenece Shaheen recibe el encargo de asaltar una antigua sepultura del Valle de los Nobles. Lo que Shaheen no sabe es que en esa tumba se encontrará con algo mucho más inquietante: el espíritu de la propia Amunet, atrapado durante más de tres mil años… y sediento de venganza. Desde ese momento, sus existencias se entrelazan de manera inevitable en un juego de poder enmarcado en el entorno de Bonaparte, sustituyendo el azul del Nilo y el oro del desierto por el rojo derramado en las calles del París revolucionario.
¿Qué me ha parecido?
Vale, vamos a ponernos un poco en contexto. Ya sabéis que me encanta la mitología. En general, me da igual. Mitos y leyendas que involucren dioses. Lo que sea. Y es que, de todas las mitologías, creo que la egipcia es de mis favoritas. Y no solo su mitología: la cultura del Antiguo Egipto me apasiona. Cuando leí la sinopsis de La voz de Amunet solo tenía un pensamiento: leerlo cuanto antes. Hablaría tanto sobre esta novela que os cansaríais, así que voy a intentar resumirlo todo, sin hacer spoilers y sin enrollarme como una persiana.
Empezaremos por lo básico. Esta novela tiene cuatro narradores que, por parejas, van explicando la historia desde dos momentos históricos distintos: el Egipto de 1346 a.C., y el Egipto de 1799, durante la época de Napoleón. Los narradores del Antiguo Egipto son Amunet, una niña con el poder de comunicarse con los animales, y Khay, un aprendiz de escriba. En el Egipto napoleónico tenemos a Shaheen, natural de Egipto, que se dedica a robar para una banda de ladrones, y a Gabriel, nacido en Francia, de viaje en el Cairo para documentarse y "agenciarse" algunas piezas para el Louvre.
Las historias de los cuatro personajes se veran completamente entrelazadas por varios motivos. Amunet y Khay se conocerán en unas circunstancias muy particulares, y su historia juntos se irá desarrollando conforme pasan las páginas de los libros. También se conocerán Shaheen y Gabriel, pero no se tratará de un encuentro fortuito: el espíritu de Amunet (sí, la misma Amunet que habla con los animales) se encargará de hacer que sus caminos se crucen. El punto de unión, pues, será la conexión entre Amunet y Shaheen, pudiendo esta última hablar con el espíritu de la egipcia.
Las dos historias se desarrollan paralelamente, teniendo en algunas ocasiones puntos de unión muy planificados, detalle que hace la lectura muy disfrutable. Además, se basan en hechos históricos muy particulares, además de incluir personajes archiconocidos. En el Egipto de Amunet, Akethatón, el faraón hereje, junto a su esposa Nefertiti y sus hijas, gobierna bajo el sello del dios Atón, suprimiendo las antiguas creencias y reprimiendo a aquellos que aún creen en ellas. Por otro lado, el Egipto de Shaheen se ha visto invadido por las tropas de Napoleón, suponiendo esto un destrozo de la cultura antigua residente en esa tierra.
Entre tejemanejes políticos, traiciones, magia y, especialmente, mucho amor, las historias de los cuatro protagonistas tomarán rumbos muy variados. Hay humor, tragedia y misticismo. Hay tiranos déspotas que pondrán muchas trabas, y buenas personas que ayudarán a nuestros protagonistas a cumplir sus objetivos. Cuatro protagonistas tan bien escritos y descritos que te parecerá que los has conocido durante toda tu vida, y de los que nunca te querrás despedir.
Personaje TOP
Khay, al 200%. No sé si será el personaje favorito de todos, aunque sí os puedo decir que pongo la mano en el fuego a que nadie lo odia. Porque Khay me cautivó desde el primer capítulo. Un chico tullido, con un pie deforme, víctima de las burlas de los chavales de su edad, con una capacidad de superación mayor de lo que él mismo habría creído. Un aprendiz de escriba que, ajeno a su destino, acabará envuelto en la historia de Amunet casi sin verlo venir.
La historia de Khay es, para mí, la más desgarradora de todas. Me ha despertado emociones, me ha hecho pasarlo muy mal. He podido empatizar con su sufrimiento en varios momentos de la novela, comprender muchas de sus actitudes. Jamás había tenido tantas ganas de colarme en un libro para poder abrazar a su protagonista y reconfortarlo. Pues eso es Khay, quizás uno de los mejores personajes que ha podido crear un autor.
¿Qué he aprendido?
Con esta novela aprendes historia, quieras o no. Algunos aspectos de la época de Amunet, como la época de Akethatón y su supresión de los dioses comunes (Horus, Anubis...), así como su historia con sus hijas, eran completamente desconocidas para mí. Igualmente, algunas cosas relacionadas con la revolución en Francia y la época Napoleónica (porque no prestaba mucha atención en clase de historia), o que haya personajes secundarios en la novela que existieron de verdad, como la adivina Marie Anne Lenormand.
En cuanto a la moraleja de esta historia, pues no sabría deciros, porque tiene muchas. Creo que me puedo quedar con el mensaje de amar sin condiciones, amar a los tuyos a pesar de sus circunstancias, amarlos hasta el infinito, hasta el final de los días y más allá.
Conclusión
Primera lectura de Victoria Álvarez, que me ha dejado con ganas de más. La voz de Amunet es autoconclusiva, así que no puedo más que alegrarme por haberla tenido en mis manos y haberlo disfrutado tanto. La historia, la narración, la descripción detallada de todos los escenarios y, especialmente, el cariño que se puede apreciar en cuanto a la creación de los protagonistas son, sin duda, características que denotan la calidad de la escritura de la autora.
Creo que Álvarez acaba de entrar por la puerta grande en mi lista de autoras favoritas, y os puedo asegurar que voy a leer más de sus obras, empezando por La ciudad de las sombras, novela que ya tengo comprada y deseando empezar, y probablemente me atreveré con Silverville o la trilogía Dreaming spires. Ahí lo dejo.
Puntuación: 5/5. Es una obra de arte, así que no le puedo poner una puntuación más baja. Leedlo y me entenderéis.
¡Gracias por leerme, readers! Si os ha gustado, podéis seguirme. ¡Así me animaré a hacer más reseñas!
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